En esta residencia, diseño de Bernardi + Peschard, el jardin rodea por completo a la construcción, llenando de vistas verdes todos los espacios de la casa. Tanto la casa como el jardín se construyeron en diferente nivel que el que tenía originalmente el terreno, con dos árboles ejemplares, una jacaranda y un fresno de mas de 60 años de antigüedad. Los árboles se protegieron durante la obra y el jardin se construyó alrededor de ellos construyendo muretes de piedra para contener el suelo incorporado y una rejilla “irving” cubierta con grava para disimular el desnivel, que al mismo tiempo permite que la base del tronco respire y no sea víctima de la pudrición. Un talud y un jardin de arbustos y herbáceas dan profundidad visual a la galería de la casa.
